APUNTES PARA EMPRESAS – JUNIO 2023

“Se mide la inteligencia del individuo por la cantidad de incertidumbres que es capaz de soportar”. Immanuel Kant

DÉJÀ VU

Estamos en un período de definiciones políticas importantes, y en algunos momentos pareciera que existen situaciones ya vividas. Quizás muy influenciada esta sensación por haber visto la serie “Diciembre 2001” en Star +, o bien por lo ocurrido en Chaco que recuerda lo de María Soledad Morales, o por el ataque a la Legislatura en Jujuy. O al ver las desprolijidades y pujas de poder en la definición de la interna del oficialismo, donde lo que menos se ve es “unión por la patria”, sino que se sospechan arreglos que tienen que ver con intereses personales (económicos, judiciales, de poder). El tener esta sensación nos puede llevar a dos sentimientos: o la depresión por entender que nada ha cambiado en veinte años o a pensar qué debemos hacer para no tropezar otra vez con la misma piedra. Para no deprimirnos debemos tener un proyecto y para no tropezar con la misma piedra debemos hacer algo distinto a lo que hicimos. Jamás el ayer es igual al hoy ni al mañana, las circunstancias cambian, el entorno cambia, las edades cambian, las motivaciones cambian. Lo que es seguro es que, suceda lo que suceda, el sector agropecuario tendrá una participación importante en lo que vendrá, y allí debemos estar participando de la mejor manera posible y seguramente entregando un plus, porque todavía creemos estar a tiempo de generar una Nación con mayúscula, una República. Ojalá podamos hacerlo.

FLOTAR O NAVEGAR

En términos náuticos no es lo mismo flotar que navegar. La diferencia sustancial es que el navegante actúa, marca un rumbo y lo corrige y adapta a medida que los vientos cambian. A veces le va bien y a veces mal, pero tiene un objetivo, un destino deseado. Mientras que flotar es estar a la deriva, sujeto a esperar que algo, bueno o malo, suceda. Flotar es estar sin un rumbo determinado, con navegantes que no coordinan sus acciones, se pelean y le echan la culpa de todo a otros. Nuestro país hoy flota. Sin rumbo. A puro conflicto. A pura incertidumbre. Con viejos actores políticos que se reciclan, prometiendo fantasías incumplibles. Con algunos que dicen la verdad y a los que parte de la ciudadanía prefiere no escuchar. Porque explicar que para dejar de flotar hay que hacer esfuerzos y pasar ciertas privaciones para tener un país sustentable, no suele ser atractivo porque no suma votos. No es sólo un problema del capitán de turno, sino que la tripulación (los ciudadanos) debemos convencernos que vale la pena, que podemos vivir mejor, educar mejor, trabajar mejor. Este año se presenta, otra vez, una oportunidad de cambio para dejar de flotar y empezar a navegar. Y hacerlo no sólo individualmente (hay muchos navegantes adaptados a los mares argentinos que dan pelea diaria) sino como conjunto. Conocemos muchas empresas y muchos ciudadanos que ya navegan, esquivando las tormentas que la política y la macroeconomía generan. Una conocida frase de John Maxwell dice que “el pesimista se queja del viento (flota), el optimista espera que cambie (flota también) y el líder arma las velas y navega con el viento que le toca”. Allá vamos.

LA MACRO EN LA MICRO

La actividad empresarial se mueve en gran parte a partir de estímulos y señales. Veamos algunas señales que brinda la macro a la micro: inflación viajando a más del 120% anual, atraso en el tipo de cambio, brecha cambiaria del 100%, coqueteo con defaultear la deuda del FMI, restricción a exportaciones e importaciones, presión fiscal creciente, regulaciones cada vez mayores al libre comercio, poca defensa del Estado sobre la propiedad privada y la seguridad de las personas. Y sigue la lista. Y la señal política increíble es que a uno de los principales responsables de generar este marco, el ministro de economía, se lo “premia” como precandidato presidencial. La segunda señal política es que algunos líderes de la oposición, que quieren ser gobierno, envían un mensaje bastante más amable y componedor (eliminar la brecha cambiaria y las restricciones a importar y exportar entre otros puntos) pero avisando que la presión fiscal bajará muy de a poco y hasta asumiendo que “las retenciones no se pueden eliminar”. Sería sin duda mejor que el escenario actual en la medida que el marco de conflicto social esté contenido. Pero hay conciencia que será lenta y trabajosa la recuperación y que se dará en un marco de precios de los productos en niveles inferiores a los del año anterior. Ser empresario en la Argentina siempre está rodeado del concepto de “la supervivencia del más apto”. Mucha energía insumida en defenderse, restando tiempo a la creación de valor.

EN QUÉ ANDAN LAS EMPRESAS AGRÍCOLAS

Es la época del año donde conviven la campaña nueva y la vieja. En la campaña vieja, ya casi terminada la cosecha de soja y en el medio de la cosecha de maíces tardíos, sin sorpresas positivas en cuanto a rindes afectados por la seca. En cuanto a la campaña nueva se está sembrando la fina (trigo y cebada), retrasada en algunas zonas por falta de humedad. Y terminando de cerrar los arrendamientos, que de alguna manera están terminando en “alza”.

El Excel de la campaña nueva está cerrando muy justo para la mayoría de las empresas, y el factor fundamental en esta época del año es el precio que se estima obtener con la nueva producción. Tema nada sencillo de estimar y capturar con coberturas  (si se presenta la oportunidad) en las condiciones actuales políticas y económicas que atraviesa la Argentina.

El “colchón” que todos de alguna manera contemplamos, que solamente es mental por el momento, es la posible devaluación o sinceramiento del tipo de cambio, que producirá este o el próximo gobierno. Decimos “mental” porque a ciencia cierta nadie sabe ni cómo ni cuándo se producirá. Recordemos que cuando este tipo de sinceramiento se produce, hay un reacomodamiento temporal de precios relativos que puede impactar sobre los precios de venta. En cuanto a los insumos, no hay faltantes por el momento para la siembra de fina, y a las distribuidoras les está costando llegar a sus objetivos de venta, producto de la campaña anterior y de cómo se viene desenvolviendo la campaña actual.  

DÓLAR SOJA 4

Por el momento estaría descartado el Dólar Maíz (por bajo volumen de ventas posibles y por el impacto que generaría en las otras cadenas). La última “bala” para conseguir dólares por esta vía, sería un Dolar Soja 4 con una estimación de recaudación de 3.000 M U$S para el Gobierno. Claro que esta última jugada depende de varios condicionantes, de que el tipo de cambio ofrecido sea atractivo, de la negociación pendiente con el FMI para el adelantamiento de los fondos, del momento “político” en el cual se ofrezca (pre o post PASO), del remanente de soja que quede sin vender en ese momento luego de una campaña de bajo volumen de producción, y de las perspectivas económicas de corto plazo que visualice el productor. Muchos condicionantes y poco tiempo para el Gobierno.

BUNGE ACORDÓ LA COMPRA DE VITERRA

Sin dudas una noticia importante a nivel mundial, y si analizamos el impacto local en la exportación de granos y subproductos según el último informe de la Bolsa de Comercio de Rosario al respecto, veremos que se fusionan la primera y cuarta empresa exportadora. Si las sumamos tendrían el 24% del comercio total, lejos de la segunda Cargill con el 12%.

A su vez, en el mismo informe se analiza la complementariedad de las empresas en los distintos productos exportados.

https://www.bcr.com.ar/es/mercados/investigacion-y-desarrollo/informativo-semanal/noticias-informativo-semanal/que-empresas

NEGOCIO AGRÍCOLA

El mercado internacional se debate actualmente en dos frentes bien distintos. Soja y maíz impactados por el “mercado climático” de EEUU, y trigo y girasol reflejando la evolución del conflicto Rusia-Ucrania. Ambos frentes trajeron aires alcistas al mercado, mercado que traía una visión y tendencia bajista por la mayoría de los fundamentals. El daño climático en EEUU es un hecho y se refleja por el inferior estado de los cultivos si se los compara con el mismo parámetro hace un año, la pregunta es si seguirá bajando. Y el conflicto entre Rusia y Ucrania sufre evoluciones semana a semana con lo cual es impredecible su desenlace, y la reacción de los compradores. En el mercado local estas subas pueden no reflejarse en paridad por varias razones, pero la más importante sigue siendo la intervención del gobierno en distintos frentes (fideicomisos, dólar agro, posible dólar soja 4, etc.). Ante este mercado y pensando que el “excel” de la nueva campaña da muy ajustado con estos precios de venta, la recomendación sigue siendo niveles de coberturas altos con la mayor flexibilidad posible. Es decir, por el momento, deberíamos tener una estrategia defensiva de coberturas, en cuanto a precios se refiere. 

HIDROVÍA

En los últimos días los exportadores argentinos y la Bolsa de Comercio de Rosario, sumado a los exportadores paraguayos, presentaron una queja al Ministerio de Transporte por la tarifa del peaje. La misma es actualmente de 1,47 u$s/tonelada y aducen que está excedida en un 130% si se consideran las contraprestaciones e inversiones ofrecidas. El tema es relevante debido a que ante la menor producción de granos el flujo de mercadería de Brasil y Paraguay ha aumentado notoriamente. El riesgo es que si esto no se acomoda, la mercadería de esos países busque salida hacia otros destinos más convenientes, con el correspondiente impacto en la molienda local, por la falta de mercadería generada por el mal año productivo.

CONGRESO BARBECHANDO

Barbechando organiza el martes 27 de junio el primer congreso de políticas públicas para la Agrobioindustria. Será en las Bolsa de Cereales de Buenos Aires y apunta a que estén presentes muchos legisladores con el objetivo de “mostrarle a la política los ejemplos de países que han hecho las cosas distintas y mejor”.

https://barbechando.org/barbechando-lanzo-el-congreso-de-politicas-publicas-en-el-congreso-de-la-nacion/

ARGENTINA VISIÓN 2040 

Como todos los años, el jueves 29 de Junio, se realiza a total beneficio de la fundación Bisblick, el 11º encuentro de reflexión bajo el título: “ Liderazgo adaptativo: Un paso del Agro a la nueva República”, pudiendo participar en forma presencial o a través de streaming.

https://argentinavision2020.com/2023/

CREA CONSULTORAS

Formamos parte de esta interesante iniciativa, una forma de vincularse, compartir experiencias, potenciar ideas y generar conocimientos que nos ayuden a crecer.

https://sites.google.com/crea.org.ar/creaconsultoras?usp=sharing

NEGOCIO GANADERO

Llegaron las lluvias a muchas zonas ganaderas, aunque obviamente en época de menores temperaturas. Se nota cierta recomposición de la base forrajera, pero inferior a lo esperado. Ha seguido la mayor oferta de venta de vacas al mercado provocando que a los precios les cueste recuperarse. Según datos del Lic. Ignacio Iriarte, la caída de precios en términos reales en el último año, por categoría, ha sido del 49% en vaca conserva, del 26% en vaca gorda y novillito, del 22% en novillos y del 37% en terneros. Una masacre para la rentabilidad, con la salvedad de que los encierres a corral salen mejor parados en términos relativos respecto al criador. El consumo interno sin capacidad de absorber más carne, o mejor dicho más carne a más precio, porque todo se vende. La exportación con demanda China repuntando, pero con precios bajos, mientras que el mercado europeo con Hilton con mejores valores ayuda a mantener fluido ese mercado. La duda es si habrá suficientes novillos gordos para abastecer en tiempo y forma hacia adelante. La expectativa está centrada en el último trimestre, esperando una primavera lluviosa y pastosa y con una menor oferta de hacienda que ayude a recomponer precios. Desde el lado del productor ganadero la intención es volver a entorar la misma cantidad de vientres, pero dependerá mucho de las condiciones del campo y del presupuesto financiero que viene golpeado. La foto es mala, pero la expectativa no se pierde. Ante un cambio de política económica en 2024, sin restricción de exportaciones y con mejora del tipo de cambio, sumado a un año climáticamente mejor, el rebote puede existir. La ganadería resiste, pero es imposible pensar una estrategia de largo plazo como país, tal como hizo Brasil, si no hay políticas estimulantes y sostenidas en el tiempo.

NEGOCIO LECHERO 

El precio de la leche Siglea en mayo fue de 96,58 $/litro (1309,27 $/kilo de sólido), lo que representa un aumento cercano al 8% respecto al mes anterior. Y respecto a un año atrás la leche subió cerca del 112%. Para junio se esperan valores acercándose a los 105 $/litro. Pelea palmo a palmo con la inflación. El precio en dólares oficiales es de 0,39 por litro que, como siempre decimos, es un “preciazo” en esa moneda, pero en realidad por la brecha cambiaria en realidad en dólares reales apenas supera los 20 centavos de dólar. En un marco de costos de alimentación crecientes provocado por la sequía y con precio de granos altos, el resultado posible de lograr es finito. Ha mejorado algo la relación de precios leche/maíz lo que actúa como un cierto alivio. Ante la entrada del invierno y con la prevista reducción en el volumen de leche producido, se nota que la demanda de las usinas (en especial las Pymes) está firme. El consumo interno se sostiene en volumen, aunque le cuesta en precio, pero la exportación respecto al 2022 ha caído cerca de un 10% en volumen y el 7% en dólares. Si esto se mantiene como tendencia sería una pésima noticia. Está firme la expectativa de una recuperación de la demanda China, pero aún no se refleja en los volúmenes. Pareciera que la estrategia actual es aguantar hasta un cambio de escenario, buscando alta eficiencia tranqueras adentro. No parece un mensaje motivador, pero sí realista.